Este festival tiene lugar el día 15 del octavo mes del calendario chino con motivo de celebrar la cosecha cultivada durante el año y dar gracias a los dioses por ello. Los habitantes se rúenen y celebran con Pasteles de Luna y té el festival. La noche culmina encendiendo linternas de papel.

Cuando estudiaba astrologia China y Feng Shui, mi maestra nos conto La historia de Chang Er sobre el origen del Festival del Medio Otoño. Según ésta, en tiempos antiguos existían diez soles y el calor extremo hizo vida de las personas muy difícil. Fue el jovén Hou Yi quien gracias a su valor derribó a nueve de los diez soles, transformándose en un héroe en todo el país. Poco después, el joven se casó con una bella y amable mujer llamada Chang Er.

La leyenda dice que Chang ´e era una hermosa dama que vivía en el cielo, donde era inmortal. Un día en el palacio donde vivía junto al que era el Emperador en el cielo, rompió un bonito delicado jarrón de porcelana. El Emperador, muy enfadado, decidió castigarla enviándola a la Tierra, con la condición de que solo volvería al cielo si realizaba un gran acto de solidaridad en la Tierra.

La hermosa dama bajó a la Tierra formando parte de una rica familia de granjeros. A través de su familia se casó con Houyi; un famoso arquero que había sido proclamado héroe por haberse enfrentado a diez soles que se elevaron uno tras otro atacando a su país.

El valiente arquero se convirtió en una persona ambiciosa y agoísta, y lo único que perseguía era lograr la inmortalidad. Cuando encontró la píldora que le conduciría a la vida eterna, su esposa, Chang ´e, se la tragó. Houyi, muy enfadado intentó castigarla y ésta en su huida saltó por lo alto de una ventana. Antes de llegar al suelo empezó a flotar hacia la Luna liberándose de la furia de su marido, y convirtiéndose en la Diosa de la Luna. El Arquero al darse cuenta de lo que habia hecho comenzo a ofrecer ofrendas a la Diosa Luna.

En la cultura china, la redondez de la luna llena simboliza la paz, la prosperidad, la unión familiar y la buena fortuna.

En la noche, las familias se sientan al aire libre para apreciar la totalidad de la luna llena, comiendo tartas lunares y pomelos y rogando por un año próspero.