Meditación con el Arcángel Miguel
El Arcángel Miguel. Es considerado como la máxima autoridad, en los ejércitos de Dios.
Cuando haces consciente, la Presencia del Arcángel Miguel en tu vida, día a día con devoción, abres la puerta a su luz y reafirmas su presencia, en toda tu existencia.
Colocamos Música adecuada para la meditación en este caso usaremos la Llave tonal Coro de los Soldados de Charles Gounod o los vitrales de la iglesia de Ottorino Respingi
Siéntate cómodamente, coloca los pies sobre el suelo, las palmas de tus manos entrelazadas una con la otra sobre tus piernas, sitúa tu cabeza entre los hombros en una posición que te resulte cómoda de ser posible en posición recta entre los dos hombros sin que te ocasiones tensión.
Toma una respiración profunda, lleva el aire a los pulmones luego al estómago y lo vas soltando por la nariz lentamente.
Respiramos nuevamente hacemos una respiración profunda llevamos el aire a los pulmones, lo bajamos ala estómago y lo vamos soltando lentamente siente como te vas relajando trata de mantener una respiración normal y calmada.
Sientes que comienzas relajando los dedos de tus pies, bien relajados, subes por el pie, relajas bien el pie, sigues respirando tranquilamente y profundizando en tu relajación, mientras relajas tus tobillos y eliminas todas las tensiones de esa zona y de todo tu cuerpo físico.
Subes de los tobillos hasta las rodillas, sintiendo la relajación que va subiendo. Relajas las rodillas y visualizas que todo lo que compone cada una de tus rodillas se está relajando y armonizando.
Ahora, en sentido ascendente, relajas tus muslos hasta llegar por delante a la ingle y por detrás, hasta donde comienzan los músculos de tus glúteos.
Relaja toda tu columna vertebral y sus correspondientes músculos, hasta llegar donde la columna se une con el cráneo.
Relaja todos los músculos de tu espalda, relaja los músculos de la nuca y hombros.
Relaja desde los hombros hasta las muñecas, relaja las muñecas y elimina las tensiones que en ellas se acumulan. Relaja tus manos y sus dedos.
Ahora, te sitúas en el cuello, relájalo muy bien, elimina todas las tensiones de tu pecho, elimina las tensiones y relaja profundamente tu plexo solar; relaja desde la cintura hasta tu zona pélvica, relaja los músculos de tus órganos genitales, relaja los músculos de tus órganos excretores.
Ya estás completamente relajado desde el cuello hasta la punta de los dedos de las manos y de los pies.
Siéntelo… Ahora, vamos a la cara, relaja los músculos de tu mandíbula, relaja los músculos de tu lengua, relaja los músculos de las mejillas, relaja los músculos de los párpados, relaja los músculos de tu frente, relaja los músculos de tu cuero cabelludo.
Siente que tu cuerpo está completamente relajado.
Sigue respirando rítmicamente y profundizando es este estado.
Siente el amor profundo de tu ángel de la guarda que está a tu lado para ayudarte en esta meditación.
Sientes que todo el lugar donde te encuentras comienza a llenarse de una maravillosa luz azul azul claro, luego intenso como el mar. Son distintas tonalidades de azul. Algo hermoso y que a la vez, se va llenando de ángeles azules y cristal…
Estos ángeles pertenecientes a las huestes del Amado arcángel Miguel, los ves con hermosos incensarios de plata de cuyas entrañas sale el humo que se esparce por todo el lugar, purificándolo y purificando a todos los presentes, preparando el ambiente y a las personas para recibir la presencia del arcángel Miguel.
Sientes su energía, su calor, se hace presente frente a ti obsérvalo resplandeciente con su túnica azul con detalles dorados y plateados trae en su mano una gran luz una esfera de luz azul con la que te irradia, salúdalo, dale las gracias por estar allí, habla con el dile cómo te sientes pídele su ayuda y protección.
Luego Repite 7 veces mentalmente Kodoish, Kodoish, Kodoish Adonai Tsebayoth, al terminar de decir esto, vez que el arcángel miguel te coloca un cinturón dorado muy brillante que irradia mucha luz , incrustrado de piedras, lapilazulis, esmeraldas, rubies, diamantes, es un cinturón electromagnético de protección.
Ahora di:
EN NOMBRE DE LA MAGNA AMADA Y TODOPODEROSA PRESENCIA DE DIOS QUE “YO SOY” DECRETO QUE SE FIRME ALREDEDOR DE MIS CUATRO CUERPOS INFERIORES, UN CINTURÓN ELECTRÓNICO DE PROTECCIÓN QUE IRRADIE SU LUZ ENVOLVIÉNDOME DETENIENDO TODA COSA QUE SEA MENOR A LA LUZ Y EL AMOR DE DIOS QUE INTENTE ACERCARSE A MI. SOLO EL AMOR DIVINO PUEDE PENETRAR ESTE CINTURÓN ¡GRACIAS PADRE POR ESTE PODER CREADOR!
Sientes que tu pecho se ensancha que te elevas del lugar donde estas sentado.
Ahora te preparas para salir de la meditación lleno de gozo, felicidad y armonía.
Toma una respiración profunda y sientes que estás sentado
Tomás otra respiración profunda y sientes todo tu cuerpo.
Tomás otra respiración profunda, y abres los ojos.