Existen historias antiguas que nos hablan de sus increibles poderes mágicos y curaciones. Se pueden encontrar en todas partes de Europa y alrededor del mundo, en el que se puede constatar que estas piedras formaban parte de su religión y modo de vida, eran sagradas.
Según las Eddas, Odín deseaba tomar la sustancia mágica hidromiel, para ello hizo uso de sus capacidades para introducirse por un agujero bajo la forma de una gran serpiente en la montaña donde estaba custodiado el hidromiel. Una vez dentro, le pidió a la guardiana del hidromiel, la gigante Gunnlod que solo le dejara beber tres sorbos de ese preciado brebaje.
Ella aprobó su petición, pero Odín la engaño, consumió toda el hidromiel y escapó de la montaña volando bajo la forma de un águila. Según la leyendas que existen alrededor de la piedra bruja, dicen que estas preciadas piedras fueron agujereada por Odín convertido en serpiente.
Una piedra bruja o piedra de Odín como también se le conoce, es una roca de cualquier tipo que tiene un agujero natural a través de ella causada por una corriente de agua.
Generalmente se encuentran en arroyos, ríos o a lo largo de la orilla del mar.
Poseen una poderosa influencia mágica para protegerse de brujerías, ya que la creencia es que la magia no puede trabajar sobre el agua que fluye y ya que estas piedras se formaron por acción de la corriente del agua. Entonces posee una poderosa influencia mágica para protegerse de brujerías.
Este poder protector mantiene a la persona que la posee a salvo de acciones negativas, envidias, hechizos o rituales cometidos contra ella.
Si la encuentras de manera casual, sin tener la intención de buscarla o encontrarla, se dice que es más eficaz, pero no deja de ser efectiva si la buscas. Lo importante es que tengas en tu poder una piedra bruja con su agujero (no necesariamente tiene que estar en el centro de la piedra el hueco) y utilizarla protegerse de brujerías y otros males.
Las Piedras de Odín tenían poderes curativos mágicos que los antiguos sacerdotes druidas en Europa utilizaron para ayudar a su pueblo sanándolo de enfermedades y por ello, veneraron estas piedras como si fueran regalos de Dios.
tradicionalmente las piedras bruja se colgaban de las ventanas, de las puertas de la casa o a modo de colgante con una finalidad protectora
Son magnificas como piedras para pedir deseos, colocándola en la palma de la mano no dominante, y se frota con el pulgar de la mano dominante (es decir tu mano más hábil), en sentido horario, mientras te concentras en la intención del deseo. Esta es una forma de visualización creativa, utilizando el roce repetitivo para enfocar la mente y luego concentrarse en el resultado deseado.
Además pueden ser usadas como un portal; esta puerta se puede utilizar para invitar a ciertas energías positivas a tu vida o despedir influencias negativas que afecten a tu realidad cotidiana. Aunque se debe tener mucho cuidado al abrir un portal en ambos sentidos. Todo lo que se necesita es la mentalidad adecuada para el uso de estas piedras y su poder mágico.
Son excelentes para sanación, frotando en el cuerpo de la persona afectada para limpiar la enfermedad. Este uso de la magia va con la idea de que el agua es una limpieza de gran pureza para protegerse de brujerías y sanar dolencias físicas.
Sugiero tenerla colgada a cuello con una cinta de seda o Cordón que además de ser un lindo adorno resulta de gran protección
Salgamos a buscar nuestra piedra de bruja o piedra de Odin.